El laboratorio del alquimista (V)
Bueno, pues después de la mudanza y de quedarme un poco más tranquilo en cuanto a trabajo, vuelvo a la carga con ARS SECRETA, tras este paréntesis más prolongado de lo habitual. Por ahora os dejo con un post ligerito, continuando con la serie de El laboratorio del alquimista.
Hoy os traigo algunas de las pinturas del holandés Thomas Wyck (1616-1677) quien, al igual que su contemporáneo David Teniers (hablamos de él en el último artículo de la serie) sintió cierto interés por plasmar el interior de los gabinetes de estudio y laboratorios de los practicantes de la Gran Obra. Su producción "alquímico-pictórica" está muy repartida por distintos museos y colecciones privadas, y sobrepasa fácilmente la docena de obras (al menos, las que yo he podido encontrar a través de la red, seguramente serán más).
En las pinturas de Wyck comienza a verse un cambio respecto a otros artistas. En estas obras el alquimista empieza a ser representado como un científico serio, rodeado de libros y herramientas de trabajo, alejándose del modelo anterior, en el que los protagonistas aparecían en medio de alambiques y retortas, muchas veces representados con una intención crítica. Ahora son más químicos que alquimistas, un cambio lógico si tenemos en cuenta que en las fechas que Wyck pintó algunas de sus obras, comenzaba a hacerse más evidente la separación entre ambas disciplinas, hasta entonces indisolublemente unidas.
Origen de las imágenes: Rijksmuseum (Amsterdam), Museo del Hermitage (San Petesburgo), Museo del Louvre (París), The Fitzwilliam Museum (Cambridge).
* Entradas relacionadas:
-El laboratorio del alquimista I, II, III y IV.
El laboratorio del alquimista (IV)
Aprovechando la publicitada remodelación del Museo del Prado y de su "mejorada" página web (ver aquí y aquí), hoy quería presentaros parte de la obra del magnífico pintor flamenco David Teniers el Joven (1610-1690). La pinacoteca madrileña tiene en su catálogo un buen surtido de sus obras y, entre ellas, alguna dedicada a la representación del interior del laboratorio de un alquimista, como esta que podéis ver bajo estas líneas.
Tal y como os expliqué en el primer post de esta serie, no fueron pocos los artistas que reflejaron escenas de alquimistas con un sentido crítico, con el afán de denunciar lo que para ellos eran supersticiones capaces de arruinar a sus practicantes. El caso de Teniers se adapta perfectamente a esta tipología, pues en sus pinturas de alquimistas se percibe claramente esa crítica ácida a esta práctica que seguía siendo muy habitual en su época.
Os dejo otros ejemplos repartidos por diversos museos y colecciones de todo el mundo:
-El Alquimista (1647-49). The Royal Collection, Londres. (click en la imagen para ampliar)
-El Alquimista, Palacio Pitti, Galería Palatina, Florencia. (Click en la imagen para ampliar).
-Alquimista. Koninklijk Museum, Amberes. (Click para ampliar).
-Alquimista, Museo Bonnat, Bayonne.
* Entradas relacionadas:
-El laboratorio del alquimista (I)
-El laboratorio del alquimista (II)
-El laboratorio del alquimista (III)